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COMEDIAS DE MORETO - Primera Parte


La Primera Parte de Comedias de Agustín Moreto se imprimió en Madrid el año 1654 por Diego Díaz de la Carrera, a costa de Mateo de la Bastida. Fue la única Parte de Comedias publicada en vida del dramaturgo y le dedicó especial atención. La descripción es la siguiente:


PRIMERA PARTE / DE / COMEDIAS / DE D. AGVSTIN MORETO / Y CABANA. / DEDICADA A D. FRANCISCO FERNANDEZ DE LA / Cueua, Duque de Alburquerque, Marques de Cuellar, Marques de Caderei- / ta, Conde de Lede∫ma y Huelma, Señor de las Villas de Mombeltran, y la / Codo[s]era, Gentil-Hombre de la Camara de ∫u Mage∫tad, General de / las Galeras de E∫paña, Virrey y Capitan General de las / Prouincias de Nueua-E∫paña. / [Escudo de armas] / CON LICENCIA, / En Madrid, Por Diego Diaz de la Carrera. Año M.DC.LIV. / A co[s]ta de Mateo de la Ba[s]tida, Mercader de libros, frontero de S. Felipe. /

4º. 4 h. + 266 fols. [ ]4 + A-Z8, Aa-Kk8, Ll2.



Moreto tenía entonces treinta y seis años y varias de sus comedias se habían publicado ya en impresos sueltos o formaban parte de volúmenes de Comedias escogidas junto a las de otros dramaturgos de la época. Por cierto que Moreto es el autor más representado en estos volúmenes después de Calderón de la Barca. Él mismo acudió en septiembre de 1654, al poco de fallecer Gaspar Fernández de Valdés a su viuda, Damiana Arias de Peñafiel, con el fin de recuperar los manuscritos de las obras que había vendido a su esposo para la representación en los teatros, posiblemente entre 1652 y 1654. Estas habían sido -al menos- las siguientes, tal como consta en la documentación que se conserva: La misma conciencia acusa, Antíoco y Seleuco, El desdén, con el desdén, Trampa adelante, La fuerza de la ley y Los jueces de Castilla. Nos consta que Damiana le cedió las cuatro primeras, que tenía manuscritas, podemos suponer que a cambio de un emolumento por devolvérselas al dramaturgo antes de los diez años prescritos.


Parece que Moreto quería disponer de sus comedias en aquel momento de bonanza para el teatro, tras la reapertura de los corrales en 1651, y legalmente no podía por no haber pasado los diez años obligados de cesión a la farándula. Moreto pretendía, seguramente, entregárselas al editor Diego Díaz de la Carrera, quien las imprimiría en Madrid a costa de Mateo de la Bastida aquel mismo año 1654 dentro de la Primera parte de comedias de D. Agustín Moreto. Estas obras manuscritas en su mayoría, si no todas, podían quizá ser autógrafas, como lo era, en efecto, El poder de la amistad, de la misma época, que Moreto había acabado para Diego Osorio el 25 de abril de 1652 y que pasó a la Primera parte con las únicas omisiones de pasajes censurados, no sabemos si por el mismo Moreto -aunque no parece probable, cuando se observa que varios de esos pasajes omitidos dejan sin sentido o con problemas métricos a otros cercanos-. También pudo ser responsable de esos cortes la censura -en muy pocas ocasiones- y, más probablemente, gentes de teatro las cuales trataron de adecuar el texto a las necesidades de una nueva representación, con muy poco respeto por el original, por cierto.


Moreto integró en este volumen de la Primera parte de sus obras, un 50% de comedias palatinas, con los siguientes títulos: El desdén, con el desdén, La misma conciencia acusa, Hasta el fin nadie es dichoso, El poder de la amistad, Lo que puede la aprehensión y El mejor amigo, el rey, esta última en la modalidad de comedia de privanza. El otro 50% se distribuye un 25% en tres obras semi-históricas: Antíoco y Seleuco, La fuerza de la ley y Los jueces de Castilla; el otro 25% son dos comedias de capa y espada: De fuera vendrá, Trampa adelante y una hagiográfica: El lego del Carmen o San Franco de Sena.


Forman, por tanto, esta Primera parte de comedias doce títulos que se indican a continuación, según se han distribuido en los cuatro volúmenes publicados por Proteo, que siguen el orden de edición de la princeps de 1654:


Comedias de Agustín Moreto. Primera parte de comedias, volumen I

dir. María Luisa Lobato, Presentación; La Primera parte. De la escena al libro, Miguel Zugasti; Preliminares, ed. de Miguel Zugasti; La fuerza de la ley, ed. de Esther Borrego; El mejor amigo, el rey, ed. de Beata Baczynska; El desdén, con el desdén, ed. de María Luisa Lobato, Kassel, Reichenberger, Colección Ediciones Críticas 165, 2008, vol. I, 579 pp. ISBN 978-3-937734-63-7.


Comedias de Agustín Moreto. Primera parte de comedias, volumen II

dir. María Luisa Lobato, coord. Judith Farré; La misma conciencia acusa, ed. de Elena Di Pinto y Tania de Miguel Magro; De fuera vendrá, ed. de Delia Gavela; Hasta el fin nadie es dichoso, ed. de Judith Farré, Kassel, Reichenberger, Colección Ediciones Críticas 176, 2010, vol. II, 517 pp. ISBN 978-3-937734-84-2.


Comedias de Agustín Moreto. Primera parte de comedias, volumen III

dir. María Luisa Lobato, coord. Miguel Zugasti; El poder de la amistad, ed. de Miguel Zugasti; Trampa adelante, ed. de Juan Antonio Martínez Berbel; Antíoco y Seleuco, ed. de Héctor Urzáiz, Kassel, Reichenberger, Colección Ediciones Críticas 179, 2011, vol. III, 594 pp. ISBN: 978-3-937734-89-7.


Comedias de Agustín Moreto. Primera parte de comedias, volumen IV

dir. María Luisa Lobato, coord. Javier Rubiera; Los jueces de Castilla, ed. de Abraham Madroñal y Francisco Sáez Raposo; El lego del Carmen, San Franco de Sena, ed. de Marco Pannarale; Lo que puede la aprehensión, ed. de Francisco Domínguez Matito, Kassel, Reichenberger, Colección Ediciones Críticas 171, 2010, vol. IV, 610 pp. ISBN 978-3-937734-72-9.


La recepción de esta Primera parte de comedias en su época fue muy positiva. Tenemos testimonios como el de Baltasar Gracián, quien en El Criticón (1657) llamó a Moreto «el Terencio de España». Conocemos también opiniones favorables a la actividad dramática de Moreto por parte de otros dramaturgos de su tiempo, entre los que se encuentran Cubillo de Aragón, Lanini, Sagredo y, más allá de nuestras fronteras, Sor Juana Inés de la Cruz.


Nuestro trabajo de edición crítica e interpretación de la obra dramática de Moreto, así como la investigación en su dramaturgia que puede verse en el apartado dedicado a publicaciones, se enmarcaron en el proyecto Teatro del Siglo de Oro, financiado por la Subdirección General de Investigación, Desarrollo e Innovación del Ministerio de Economía y Competitividad (HUM2004-02289/FILO) y contó también con el patrocinio del TC-12, en el marco del Programa Consolider-Ingenio 2010, CSD2009-00033, del Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica.

 

 

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